Amélie (Le fabuleux destin d’Amélie Poulain título original) es una película francesa de 2001 dirigida por Jean-Pierre Jeunet, co-escrita por el director Guillaume Laurant y protagonizada por Audrey Tautou.
La historia se centra en el particular personaje de Amèlie, una niña aislada del resto por decisión de su padre (debido a su equivocada creencia de que la pequeña sufría problemas cardiacos), y por la trágica muerte de su madre. La protagonista crece, y como se cita en la película, “pasan los días, los meses y después los años”, sin que alrededor de ésta nada parezca cambiar o tener vida. Es cuando la joven cumple 22 años, coincidiendo con la muerte de Lady di en 1997, cuando su vida comienza a adquirir sentido: el descubrimiento de un pequeño tesoro despierta en Amèlie el deseo de volcarse hacia los demás para hacer felices sus vidas, inventando toda clase de estrategias de lo más originales y conmovedoras en la existencia de varias personas de su entorno (Suzanne, Georgette, Gina, Hipólito o Joseph).
Amèlie es una de las películas francesas más taquilleras de todos los tiempos (más de 30 millones de espectadores en el mundo), marcando un fenómeno muy poco usual en su fecha: desbancar a las siempre taquilleras películas estadounidenses en Francia y lograr una gran repercusión fuera de su país, en EE.UU, Europa, América Latina y Asia. Su gran calidad ha sido reconocida los prestigiosos premios BAFTA a mejor guión original y diseño de producción, así como los premios César a mejor dirección, mejor música, mejor dirección artística y mejor película.
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